· Comúnmente conocidos como drones, la llegada de estos dispositivos ha sido de gran ayuda en el estudio de las ciencias de la tierra, señala investigador de la UABCS
De acuerdo con el Mtro. Alejandro Ramos Rodríguez, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), el gran avance tecnológico que se ha tenido en las últimas décadas ha contribuido, en mucho, al trabajo que se desarrolla en los diferentes campos de la ciencia.
Tal es el caso de la llegada de los VANT o Vehículos Aéreos No Tripulados, dispositivos que actualmente se conocen como “drones” debido a una conceptualización francesa.
Según explica el catedrático universitario, adscrito al Departamento Académico de las Ciencias de la Tierra, este tipo de unidades de vuelo se caracteriza por ser un equipo que puede controlarse por un piloto, un software o un GPS, ya sea en la modalidad manual o programada.
Dependiendo del modelo y sofisticación, pueden tener otras ventajas como sistemas de autocolisión, infrarrojos, brújula interna, barómetro, mejor estabilización, trímetra láser, entre otros componentes que permiten una mejor navegación.
Ramos Rodríguez refiere que, en muchas ocasiones, los VANT se utilizan en la parte recreativa para tomar fotos y videos, pero en el ámbito científico tienen una gran aplicación pues, al ser aéreos, ofrecen un espectro muy amplio de registro y permiten llegar a lugares de difícil acceso.
En el caso de las geociencias, su área de conocimiento, describe que generalmente se usan para hacer topografía, modelos digitales y tridimensionales e, incluso, modelos de un sitio de interés, como determinar pendientes hidrológicas y establecer zonas de riesgo o alguna reconstrucción simulada de un lugar.
Asimismo, al mapear áreas muy grandes sin estar en contacto con la superficie, se puede medir la vegetación o, inclusive, determinar si esa región o las plantas están haciendo fotosíntesis apropiadamente.
Mencionó que algunos de los últimos proyectos en los que ha colaborado de forma multidisciplinaria es en la medición de coberturas de mangles y otras especies en Isla Espíritu Santo; además en otro relacionado con tortugas, para determinar cómo la morfología de la playa influye justamente en el éxito de anidación.
De igual forma, el catedrático universitario señaló que recientemente hizo un modelo digital del Campus universitario central, como parte de un proyecto institucional que consiste en elaborar un plan de manejo integral del recurso hídrico.
El investigador de la UABCS hizo hincapié en que de ninguna forma los drones van a suplir al ser humano, pero sí se han convertido en una herramienta muy útil para estudiar o monitorear áreas muy extensas en un menor tiempo, reduciendo el trabajo de campo incluso a minutos, cuando, sin este tipo de dispositivos, llevaría horas o incluso días.
Para quienes están interesados en adquirir uno de estos dispositivos, el Mtro. Alejandro Ramos recomendó buscar modelos acordes a sus posibilidades económicas, pero también determinar el uso que le darán, pues entre más costoso, probablemente esté mejor equipado.
Dijo que actualmente los VANT con acceso público han mejorado mucho y además existen cursos y tutoriales básicos que las personas pueden seguir para aprender a utilizarlos e ir mejorando con la práctica.
Para quienes comienzan con esta experiencia, recomendó que siempre estén al tanto de las baterías y, de ser posible, adquirir algunas extras para cuando estén ya en campo. También instó a informarse siempre sobre las condiciones atmosféricas y verificar que no haya cerca animales como águilas o gaviotas que puedan atacar el equipo y hacerlo caer.