Un preocupante panorama se vislumbra en México con respecto a la cobertura de vacunación en el país. Según los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2020, la cobertura de vacunación contra la tuberculosis en niños y niñas de entre uno y dos años de edad apenas alcanzó un 78.5 por ciento. Esto representa una caída de aproximadamente 20 puntos porcentuales en comparación con los datos registrados en 2018-2019, cuando la cobertura de esta vacuna era del 97.3 por ciento.
Sin embargo, la tuberculosis no es el único problema preocupante. En general, la cobertura con el esquema completo de vacunación en niños, niñas y adolescentes está por debajo del 80 por ciento. En el caso de los menores de hasta dos años de edad, solo el 26.6 por ciento cuenta con el cuadro completo de vacunación, en contraste con el 32.9 por ciento registrado en 2018-2019.
La cobertura de vacunación contra la tuberculosis ha experimentado una caída sostenida en los últimos años, disminuyendo casi 10 puntos porcentuales de 2019 a 2021, y otro 10 puntos en el año pasado. Cabe destacar que México registra más de 28 mil casos de tuberculosis cada año, y sorprendentemente, el 30 por ciento de las personas portadoras de la microbacteria desconoce su situación.
Un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública revela que, a diferencia de la tendencia global de reducción en la incidencia de tuberculosis, México muestra un aumento en la prevalencia de esta enfermedad. Ante esta situación alarmante, el instituto plantea varias recomendaciones, entre las cuales destaca la necesidad de alcanzar una cobertura universal en recién nacidos con la vacuna del bacilo de Calmette-Guérin (BCG).
Es preocupante observar que solo dos de las seis vacunas que conforman el cuadro básico para menores de hasta dos años, como la tuberculosis, hepatitis B, pentavalente/hexavalente, neumococo (PCV), rotavirus y la SRP (sarampión, paperas, parotiditis), cuentan con una cobertura superior al 80 por ciento. Otras vacunas, como la hepatitis B, pentavalente/hexavalente y la SRP, se encuentran por debajo de esta cifra.
La encuesta revela también que solo el 72 por ciento de los menores recibieron la primera dosis de la vacuna contra sarampión, rubéola y parotiditis (SRP). Estos datos son motivo de preocupación, ya que la falta de inmunización adecuada puede tener consecuencias graves para la salud pública.
En el caso de las vacunas para adolescentes, la situación no mejora. Solo el 43.7 por ciento de ellos han sido inmunizados contra el virus del papiloma humano (VPH), una vacuna vital para reducir la incidencia del cáncer cervicouterino. Las coberturas para la hepatitis B, el tétanos y la vacuna contra el sarampión-rubéola (SR) también son alarmantemente bajas.
Uno de los hallazgos más preocupantes es que entre el 10 y el 20 por ciento de todos los grupos de edad carecen de inmunidad contra el tétanos, siendo particularmente baja entre el grupo de 4 a 19 años.
Ante estos alarmantes resultados, es fundamental que las autoridades de salud y la sociedad en su conjunto tomen medidas urgentes para promover y mejorar la cobertura de vacunación en México. La falta de inmunización adecuada pone en riesgo la salud de la población y puede dar lugar a la propagación de enfermedades prevenibles. ¡No podemos ignorar este llamado a la acción!
Los datos muestran que solo el 78.5% de los niños y niñas de entre uno y dos años de edad recibieron esta vacuna, lo cual representa una caída de aproximadamente 20 puntos porcentuales en comparación con la cobertura registrada en 2018-2019, que alcanzaba el 97.3%.
De manera general, la cobertura de vacunación completa en niños, niñas y adolescentes está por debajo del 80%. En el caso de menores de dos años, solo el 26.6% cuenta con el esquema completo de vacunación, mientras que en 2018-2019 esta cifra era del 32.9%.
La disminución en la cobertura de vacunación contra la tuberculosis ha sido constante en los últimos años. Entre 2019 y 2021, la cobertura cayó casi un 10%, y el año pasado experimentó otra disminución del 10%. Cabe destacar que cada año se registran en México más de 28,000 casos de tuberculosis, y aproximadamente el 30% de las personas portadoras de la bacteria desconocen su condición.
Un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública indica que, a diferencia de la tendencia global, donde se observa una reducción en la incidencia de la tuberculosis, en México se evidencia un aumento en la prevalencia de la enfermedad. Ante esta situación, el organismo plantea diversas recomendaciones, entre ellas, lograr una cobertura universal de la vacuna BCG en recién nacidos.
De las seis vacunas que conforman el cuadro básico para menores de dos años, solo dos, la vacuna contra el rotavirus y la vacuna contra el neumococo, tienen una cobertura superior al 80%. La vacuna contra la tuberculosis tiene una cobertura superior al 70%, mientras que el resto de las vacunas presentan una cobertura por debajo de estas cifras.
La Ensanut también revela que solo el 72% de los menores recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión, rubéola y parotiditis (SRP). Además, se destaca que la cobertura de vacunación en adolescentes es aún más baja, con solo un 43.7% de ellos inmunizados contra el virus del papiloma humano (VPH), una vacuna que se administra desde 2012 para reducir la incidencia del cáncer cervicouterino.
Otras vacunas también presentan tasas de cobertura alarmantemente bajas en adolescentes, como la vacuna contra la hepatitis B, con un 31.8%, la vacuna contra el tétanos, con un 38.5%, y la vacuna contra el sarampión-rubéola (SR), con un 32.6%.
Los resultados de la encuesta revelan que entre el 10% y el 20% de todos los grupos de edad no cuentan con inmunidad contra el tétanos, siendo particularmente baja en el grupo de 4 a 19 años.
Estos datos ponen de manifiesto la necesidad de fortalecer los programas de vacunación en México, garantizando una cobertura amplia y accesible para proteger la salud de la población