- La estrategia “3×1=3 por mi salud”: no a las bebidas azucaradas, ni a la comida chatarra; fomenta las actividades físicas.
- El 30 por ciento de infantes en México y el 70 por ciento de adultos tienen sobrepeso u obesidad, lo que representa un gran reto de salud pública.
La diabetes mellitus y la hipertensión arterial, están dentro de las principales enfermedades crónicas que afectan a la población derechohabiente del país, señaló el director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Luis Antonio Ramírez Pineda.
De acuerdo con el Informe Financiero y Actuarial del Instituto, 1 de cada 3 niños en nuestro país tiene sobrepeso u obesidad, mientras que en adultos la medida es 7 de cada 10, esto representa un reto de salud pública, pues los datos arrojan que hay un aumento de estas enfermedades y el riesgo en la actualidad está latente en personas más jóvenes, afectando incluso a los más pequeños.
Las bebidas azucaradas, comida chatarra y el sedentarismo, son los principales factores de riesgo de estos padecimientos; aunado a ello, estos malos hábitos alimenticios y la falta de actividad física, contribuyen a otras afectaciones a la salud, tales como: caries, depresión, riesgo de cáncer, enfermedades del corazón y daño renal.
Es por ello que Luis Antonio Ramírez Pineda, a fin de fortalecer el autocuidado de la salud en la población, lanza la estrategia de autocuidado y promoción de la salud “3×1. 3 por mi salud”.
Por su parte, Ramiro López Elizalde, titular de la Dirección Normativa de Salud, explicó que estas acciones son fáciles de llevar a cabo, no hay limitante para aplicarlas en centros de trabajo, centros educativos en niños y niñas, así como en los hogares. “Estamos convencidos que para cuidar y fortalecer la salud de nuestro país, debemos hacernos responsables de nuestra persona, es fundamental mejorar nuestros hábitos y estas 3 acciones “Hoy y mañana sin bebidas azucaradas”, “Hoy y mañana sin comida chatarra” y “Hoy y mañana, 10,000 pasos por mi salud” nos ayudan a mantenernos saludables.
La actividad física, es considerada una actividad cardiovascular, por lo que ayuda a mejorar el funcionamiento de nuestro sistema cardíaco en el que se incluye el corazón y los pulmones. Además, abona a bajar los niveles de estrés y en combinación con una dieta saludable, contribuye en la pérdida de peso.