Una hora después de que Elon Musk anunciara que Tesla ya no aceptaría pagos con Bitcoins se borró más de un cuarto de billón de dólares del mercado mundial de criptomonedas.
El empresario multimillonario y entusiasta de las criptomonedas citó preocupaciones sobre el impacto ambiental de Bitcoin, que tuvo el efecto dominó de hacer caer el precio de casi todos sus rivales, con una excepción notable.
La criptomoneda Ada, basada en la plataforma Cardano, no solo evitó una caída de precios, sino que en realidad aumentó un 20% inmediatamente después del tuit de Musk, antes de subir a un nuevo máximo histórico durante el fin de semana por encima de los US$ 2.
Una razón de esto es su tecnología subyacente, que se basa en una prueba de participación, no en una prueba de trabajo. Esto significa que no depende de computadoras que consumen mucha electricidad para procesar transacciones y generar nuevas unidades de Ada.
Cardano se describe a sí misma como la criptomoneda “más ambientalmente sostenible”, gracias a su innovador protocolo blockchain de prueba de participación que valora el porcentaje de monedas que posee un minero en lugar del poder de procesamiento que tiene.
A principios de este año, el fundador de Cardano, Charles Hoskinson, estimó que su red usa menos energía que el 0.01% de la red de Bitcoin. En teoría, el sistema de prueba de participación podría lograr más de cuatro millones de veces la eficiencia energética de un sistema de prueba de trabajo, como el de Bitcoin.
No es la única criptomoneda que usa prueba de participación o que toma en consideración su impacto ambiental, pero es fácilmente la más grande.
Más allá de sus credenciales climáticas, Cardano también se convirtió recientemente en una red comunitaria completamente descentralizada, lo que significa que su empresa matriz ya no tiene control sobre su cadena de bloques. Los analistas de mercado afirman que este desarrollo lo convierte en una propuesta atractiva para los inversores.
“Este hito ayudará a Cardano a posicionarse mejor para desafiar a los principales rivales en el criptoverso”, dijo Nigel Green, director ejecutivo de la firma de asesoría financiera deVere Group.
En lugar de simplemente compararlo con otras criptomonedas, el potencial de Cardano se comparó con los gigantes tecnológicos globales como Amazon, Facebook y Netflix, y las enormes valoraciones que los acompañan.
“Cardano tiene como objetivo convertirse en una computadora financiera global”, afirmó la publicación. “¿Es eso más de lo que Netflix puede ofrecer? Netflix es un servicio de transmisión… Creemos que Cardano puede tener un impacto mayor. ¿Cardano podría ser mejor que Facebook? Facebook es solo una red social. Cardano está aquí para todas las personas que podrían usar moneda descentralizada y crear servicios descentralizados.
“¿Cuál podría ser el precio de Ada en unos años? Si estás de acuerdo con nuestra comparación de Cardano con empresas tecnológicas, entonces es bastante fácil… Podría ser enorme. Cardano podría tener una capitalización similar a la de los gigantes tecnológicos”.
En el año y medio desde que se escribió esto, Cardano se ha convertido en la cuarta criptomoneda más valiosa del mundo con una capitalización de mercado superior a US$ 70.000 millones. Si bien esto aún puede estar muy lejos de la valoración de US$ 200.000 millones de Netflix, lo coloca a la par con el gigante tecnológico chino Baidu, y más que el valor combinado de Dropbox, McAfee antivirus, Slack y LG Electronics.
Musk ya ha mostrado su preferencia por otras criptomonedas como alternativa a las monedas fiduciarias al aceptar pagos de Dogecoin en SpaceX, otra de sus empresas. La pregunta ahora será si el potencial prometido por el menos conocido Cardano puede popularizarse y materializarse en una escala similar.