Los nazis usaron una metanfetamina llamada Pervitin. Según explica el historiador James Holland, los científicos alemanes experimentaron con ella antes de la guerra, administrándosela a los estudiantes para ver cuánto tiempo podían estar despiertos y seguir rindiendo correctamente en los exámenes. Pero, además, se comercializaba como un “estimulante recreativo” durante los años 30.
Los nazis usaron una metanfetamina llamada Pervitin, que habían experimentado antes con estudiantes para ver sus efectos
En la Segunda Guerra Mundial se administró el Pervitin a los soldados de primera línea, pero también a los pilotos de la Luftwaffe, que afrontaban largas misiones para bombardear objetivos británicos. El objetivo es que no se quedaran dormidos en el viaje y para ello recurrieron a enormes cantidades de metanfetamina.
Un estudio de la Oficina de Guerra británica recogido en 2011 por el historiador Nicolas Rasmussen en The Journal of Interdisciplinary History reveló que sólo durante los tres meses que duró el Blitzkrieg, el ataque sin descanso de los bombarderos alemanes sobre el Reino Unido entre abril y junio de 1940, se enviaron 35 millones de tabletas de Pervitin al frente.
Los efectos de estas drogas eran tremendos: se decía que los soldados alemanes podían estar 10 días combatiendo y marchando sin dormir e, incluso, hay recortes de periódicos británicos de la época que hablan de paracaidistas nazis que saltaban “fuertemente drogados, intrépidos y enloquecidos”.